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En busca de la justicia en la realidad jurídica de Colombia: Más allá de las series

Foto del escritor: Germán OrtegaGermán Ortega

Son muchas las series o películas que nos presentan casos verdaderamente complejos desde lo jurídico que posteriormente se resuelven con gran facilidad y estrategias únicas. Son historias con las que nos conectamos y hasta se nos eriza la piel gracias a las increíbles estrategias de los abogados protagonistas para “hacer justicia”.

Por ejemplo, hace un tiempo me recomendaron la serie de Netflix, El Abogado del Lincoln, sin duda logró engancharme. Sin embargo, esta producción en la que el gran Mickey Haller consigue obtener la libertad para quienes han sido condenados injustamente nos muestra un contexto que, en la práctica, resulta excesivamente difícil.

Mientras que este y muchos otros dramas de televisión nos sumergen en un mundo de emociones y giros argumentales, la realidad de la justicia en el sistema legal de Colombia es una enredada telaraña en la que liberar a una persona inocente no es tan simple como lo representan. Debemos empezar por conocer la herramienta: la acción de revisión.

El artículo 192 del Código de Procedimiento Penal -Ley 906 de 2004- dispone los casos en los que la acción de revisión procede contra sentencias ejecutoriadas, pero la ruta hacia la liberación de un condenado injustamente es mucho más intrincada en la práctica.

El Desafío de la Revisión Judicial en Colombia En el día a día, los defensores que buscan la revocatoria de la sentencia condenatoria que priva de la libertad a quien es inocente, enfrentan una serie de obstáculos que no terminaría nunca de redactar. Si bien el referido artículo del Código de Procedimiento Penal nos brinda una serie de opciones y una base “sólida” para la revisión de una sentencia, su puesta en marcha y aplicación parecen una tarea titánica y lejana a lo “rápido y simple” que se puede ver en las series. Veamos los casos en los que se puede interponer una acción de revisión en Colombia contra sentencia condenatoria:


Condenas conjuntas e imposibilidad de comisión: En casos en los que varias personas son condenadas por un mismo delito, pero se demuestra que este solo podría haber sido cometido por una, la revisión puede ser solicitada. No obstante, demostrar esto requiere un trabajo probatorio extenso y un recuento fáctico que, a veces, parece un callejón sin salida.

Prescripción y causales de extinción: La revisión puede proceder si se dictó una sentencia condenatoria en un proceso que no debería haberse iniciado o continuado debido a la prescripción de la acción penal u otras causales de extinción de la acción.

Hechos nuevos y pruebas desconocidas: Presentar pruebas o hechos nuevos después de promulgada la sentencia condenatoria, situación que en la práctica es un camino arduo. En la gran mayoría de ocasiones este mecanismo es una piedra en el camino puesto que implica investigaciones exhaustivas y de alto costo.

Vicios de carácter penal en la sentencia: La revisión es posible si se demuestra -con sentencia en firme- que el fallo original fue determinado por un delito del juez u otra persona involucrada en el caso.

Fundamentación en pruebas falsas: Si se demuestra que el fallo original tuvo como fundamento principal la valoración de pruebas falsas, se puede solicitar la revisión. Sin embargo, identificar y demostrar la falsedad de las pruebas puede ser un desafío de grandes dimensiones.

Cambio de criterio jurídico: Si un cambio en el criterio jurídico afecta favorablemente la sentencia condenatoria, la revisión podría proceder. Aun así, este camino implica la interpretación de la jurisprudencia y su puesta en práctica no pareciera ser un camino tan fácil.

A pesar de las escenas impactantes que siempre se nos han mostrado en las pantallas en las que una persona inocente recupera su libertad, el verdadero procedimiento para liberar a un inocente condenado en Colombia encuentra muchos más obstáculos. El mecanismo pertinente es la acción de revisión, pero presentarla y lograr el objetivo deseado, resulta un trámite excesivamente complejo.

Aunque las series o películas pueden entretenernos con abogados que son casi héroes, no podemos olvidar que la realidad de la justicia en Colombia es un fin al cual los medios no siempre permiten llegar.

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